lunes, 11 de octubre de 2010

SONETO ENAMORADO

Vienes a mí como la noche,
velada con tules oscuros,
como inquebrantable muro
donde grafito mis reproches.

Eres como el lirio del campo
que se oculta en su hermosura,
y a la vez, como la Luna
dando al mar sus alabastros.

Cómo estar en tus ensueños,
correspondido enamorado
y ser tu eterno dueño...

Cómo enseñarte mi llanto,
cuando mis ojos no lloran
y mi corazón desangro...

Fuengirola, 2 de abril de 1996.

(Hay que ver... mi primer soneto)

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